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Arquitectos: Andréa Helou + Julieta Fialho
- Área: 90 m²
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Fotografias:Andréa Helou, Julieta Fialho, Lili Fialho, Arthur França
Como trabajo final de la Escola da Cidade, debíamos estudiar y proyectar para el área este de Sao Paulo. Como la mayor parte de la ciudad, esta zona carece de espacios públicos y de ocio. En este lugar específicamente hay un gran vacío que se transformará en un parque lineal con viviendas, como parte del programa RENOVASP de la prefectura de São Paulo. Sin embargo, en la actualidad esta zona verde con canchas de fútbol está totalmente amurallada.
Si
el concepto del muro es separar dos partes:
pública y privada, ¿cuál es la razón de generar un espacio público amurallado? Entendemos que se necesita un cerramiento, sin embargo, en lugar de segregar a un límite, ¿por qué no hacer interactuar los dos lados y generar algo nuevo? Así es como quisimos repensar el concepto del muro y en vez de bajarlo, nos aprovechamos de él y lo usamos como soporte y estructura para crear un mobiliario urbano diverso, sirviendo tanto a los transeúntes como a los usuarios de las canchas de fútbol. El muro ganó un nuevo carácter.
"La comprensión de la ciudad en movimiento significa aceptarla como un cuerpo que se (re)organiza en el tiempo y no que simplemente se reemplaza". - Marta Bogéa
El proyecto genera un mobiliario urbano como bancos, graderías, basureros para el reciclaje, lugares de almacenamiento, soportes para bicicletas, jardineras y luminarias. Decidimos construir porque siempre tuvimos el deseo de aprender y practicar. Sin embargo, ¿cómo hacerlo? Creamos una película y recaudamos dinero a través de crowdfunding.
Al mismo tiempo, comenzamos a buscar los materiales y formas de hacer viable el proyecto. El presupuesto era escaso, así que elegimos materiales reutilizados, tales como tambores de aceite que se convirtieron en gabinetes o latas de pintura que resultaron en basureros. Sin embargo priorizamos siempre la calidad y la durabilidad del proyecto.
Creemos que es esencial involucrar a la comunidad en el proyecto. Así que la idea era diseñar y construir implicando a la comunidad, los donantes, los niños, los estudiantes y algunos actores contactados para participar en el proceso de construcción.
Aprendimos que el papel del arquitecto puede ir mucho más allá del dibujo. Más que una instalación pública que estará disponible para todos, esperamos que el nuevo muro sirva como ejemplo de como se puede mejorar el espacio público en nuestras ciudades.
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